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lunes, 14 de abril de 2025

El voto femenino y la República

 Nos cuenta Trifonia Melibea Obono:

¿Guinea Ecuatorial debería conmemorar la Segunda República Española, nacida el 14 de abril 1931, en un día como hoy? Sí, y por un logro principal: el voto femenino, que no fue un logro de “los padres de la independencia” sino de Clara Campoamor, responsable de la conquista del sufragio femenino en España cuando Guinea Ecuatorial estaba envuelta, todavía, en la Guinea Española como colonia.  

Guinea Ecuatorial se independizó en 1968 y para entonces las mujeres españolas tenían vetado el acceso al espacio público. Y nosotras, recién salidas del yugo colonial pudimos votar, ¿Por qué?

Pudimos votar porque, a un lado, el régimen político español (el franquismo) necesitaba contentar a la Europa democrática y a los Estados Unidos, espacios geopolíticos (y amigos políticos) que determinaron el fin de la empresa colonial y el comienzo de la empresa neocolonial. Y porque al otro lado, los movimientos independentistas guineoecuatorianos formados por varones se encontraban envueltos en asuntos personales, disputas partidistas, y en la necesidad de transmitir una imagen de país libre vestido de modernidad. Así que… ¿el voto femenino en el tablero de ajedrez? Sí.

Sin embargo, la agenda de género ni entonces ni en la actualidad ocupa un párrafo en las agendas políticas. En el día de hoy, 14 de abril, conmemoramos que determinados logros de la Segunda República (entre estos el voto femenino, que a Clara Campoamor le costó el exilio y la inquina de buena parte de la élite política española), fueron utilizados (incluidos en la Constitución de Guinea Ecuatorial) por el franquismo, con el fin de contentar a Estados aliados: Guinea Ecuatorial se convertiría en una democracia...

Al final el primer gobierno de Guinea Ecuatorial integrado por sensibilidades políticas diversas demostró que el derecho al voto de las mujeres fue parte de un juego político frente a una España que oficialmente se había marchado con la independencia, y frente a mujeres feministas que erróneamente proyectaron expectativas en “los padres de la independencia”.


 



 

sábado, 28 de diciembre de 2024

La aterradora historia

Hace unos meses publicábamos sobre un poeta de Santa Isabel que acabó en un campo de concentración...

Hoy le toca a otro, y su relato nos llega desde Colombia, con "La aterradora historia de Francisco Ballovera, un escritor que no sabe por qué está encarcelado en Guinea Ecuatorial" por Johari Gautier Carmona en Panorama Cultural:

La célebre obra “El proceso”, de Franz Kafka, se queda pequeña ante el caso de este autor africano. La realidad del país tropical no tiene compasión con sus ciudadanos, ni siquiera para los que propugnan el amor a las letras y hablan desde las ideas. Tampoco les ofrece una tregua para creer en algo mejor y esperanzador.


El relato es el siguiente:

Hay países en los que llegar a la cárcel, puede ser lo más parecido a una lotería nefasta. Una concatenación de situaciones incomprensibles, injustas, sin sentido y sin justificación. Guinea Ecuatorial podría ser un buen ejemplo y el escritor Francisco Ballovera el hombre desafortunado (y desoído) de esta historia. 

La célebre obra “El proceso”, de Frantz Kafka, se queda pequeña ante el caso de este autor africano. La realidad del país tropical no tiene compasión con sus ciudadanos, ni siquiera para los que propugnan el amor a las letras y hablan desde las ideas. Tampoco les ofrece una tregua para creer en algo mejor y esperanzador. La dictadura en la que está inmersa Guinea Ecuatorial es ciega, desalmada y terriblemente longeva.

El arresto de Francisco Ballovera Estrada se produjo el 22 de julio del 2024, cuando el poeta acudió a la Comisaría Central de Malabo –también conocida localmente como “Guantánamo”– para llevar comida y agua a unos protestantes encarcelados que habían firmado una carta en la que rechazaban explícitamente el uso de dinamita por parte de la empresa SOMAGEC en la isla de Annobón (para la construcción de una carretera a la cual se han opuesto numerosos habitantes debido al deterioro que han sufrido sus viviendas).

Francisco Ballovera realizó su visita en el periodo estipulado, sin ir en contra de las reglas de la institución, pero el escritor fue detenido ese mismo día por la Gendarmería Nacional sin que se aportaran mayores explicaciones. Enseguida, voces disidentes apuntaron al perfil sindicalista o político del arrestado. Ballovera es, efectivamente, miembro del Ejecutivo Nacional del partido “Convergencia para la Democracia Social” (CPDS), sindicalista de la organización española Unión General de Trabajadores, y empleado de la Oficina de la Cooperación de la Embajada de España en Malabo. Pero otras voces enfatizaron también su origen annobonés como motivo de su arresto. Es el caso reciente de la escritora Trifonia Melibea quien escribió el 15 de noviembre en sus redes sociales –coincidiendo con el Día Internacional del Escritor en Prisión (Writers Prison Day)–, que el escritor Francisco Ballovera “está encarcelado por ser annobonés (minoría étnica) y guineoecuatoriano consciente”.

La idea de una supuesta independencia de Annobón, promovida desde distintos círculos, ha sido motivo de tensión entre el gobierno central en Malabo y la isla de Annobón. Evidentemente, en un régimen como el de Guinea Ecuatorial, en donde la libertad de expresión es casi inexistente (según los informes de Amnesty International y Reporteros sin fronteras, Guinea Ecuatorial ocupa el puesto 120 de 180 países en temas de libre expresión), cualquier crítica o denuncia procedentes de territorios periféricos, como Annobón, pueden ser etiquetados como subversivos o malintencionados.

A nivel local, muchas detenciones pasan desapercibidas o se ven silenciadas por el miedo persistente y tenaz. Pocas se ven respaldadas a nivel internacional, como sucedió con el dibujante Ramón Esono en 2017 quien se benefició -en palabras de Amnistía Internacional[1]- de una “coalición mundial” compuesta por cientos de artistas, activistas y organizaciones dedicadas a proteger la libertad artística, la libertad de expresión y otros derechos humanos. 

En el caso de Francisco Ballovera, el ruido de su encarcelación llegó a mediatizarse gracias al pronunciamiento de Human Rights Watch que pedía «la liberación inmediata de Francisco Ballovera Estrada y de todos los ciudadanos detenidos arbitrariamente en relación con las protestas pacíficas en la isla de Annobón». Poco después, los escritores reunidos en PEN América retomaron ese reclamo y solicitaron su liberación: «PEN América se une a Human Rights Watch (HRW) para pedir a las autoridades de Guinea Ecuatorial que liberen inmediatamente al poeta Francisco Ballovera Estrada, detenido arbitrariamente y sin cargos hace más de una semana». Y, sin embargo, el silencio volvió a imponerse después de manera estruendosa.  

Preguntado acerca de estas últimas encarcelaciones del régimen de Guinea Ecuatorial, el escritor ecuatoguineano Donato Ndongo nos respondió con términos contundentes. “Por desgracia, no son únicos ni excepcionales los casos de Ramón Esono y Francisco Balloverra. El régimen no tolera ninguna discrepancia, por nimia o comedida que sea, sobre todo si proviene de los que ellos consideran "intelectuales". Como he recordado a menudo, el actual es mera continuación del régimen represor instalado en Guinea Ecuatorial desde la independencia en 1968. No olvidemos que Teodoro Obiang Nguema era, de hecho, el número dos del Francisco de Francisco Macías, su brazo ejecutor de cuantos crímenes se cometieron en la isla de Bioco. Los detalles están en mi libro Historia y tragedia de Guinea Ecuatorial.” 

Donato Ndongo, autor de obras literarias imprescindibles para conocer la Guinea Ecuatorial actual, ésa que nació con las independencias africanas y cayó en una deriva autoritaria que todavía sigue sin resolver, vive exiliado en España desde el año 1994 debido a su oposición al gobierno de Teodoro Obiang. Desde su llegada a la Península Ibérica, nunca ha dejado de denunciar la tiranía de un país que exporta forzosamente a quienes piensan diferente. “Yo mismo tuve que salir de mi país porque me amenazaron de muerte –explica Donato–. No se atrevieron a encarcelarme por ser más conocido internacionalmente y porque, en aquel momento, era delegado de la Agencia EFE. Desde la independencia, son incontables los casos de personas como Ramón y Paco, encarceladas o asesinadas injustamente: abogados, médicos, artistas, profesores, maestros... Desde el filólogo Manuel Castillo Barril (annobonés como Paco Ballovera) a médicos como Elías Maho Sicachá”.

Cinco meses después de su encarcelación, el ruido entorno al escritor Francisco Ballovera ha decrecido notablemente. La atención se ha difuminado. Y ese olvido también es sinónimo de sufrimiento. Sabemos gracias a las respuestas de unos allegados –que mantienen el anonimato bajo el nombre de “Colectivo Biafra”– que Francisco Ballovera ha pasado por tres instituciones carcelarias: la Comisaría central de Malabo en donde estuvo retenido durante un mes, luego, fue trasladado a la prisión colonial de Black Beach, y finalmente, llegó a la prisión Oveng Azem, donde permanece todavía hoy. Ese recorrido sin sentido, ambiguo e insensible, es el método que emplea el gobierno para mantener a los detenidos fuera de la atención pública, pero también con el fin de mantenerlo sumergido en un proceso inentendible, sin juicio al horizonte: al igual que “El proceso” de Kafka. Nadie sabe claramente por qué Ballovera está detenido. Ni siquiera él mismo, y esto se produce porque las autoridades saben jugar dolorosamente con los escenarios, los tiempos y los silencios.

Ninguno de los lugares mencionados nos permite augurar un buen trato. La Comisaría central de Guinea Ecuatorial se ha ganado el apodo de “Guantánamo” por el maltrato dado a los detenidos. En un informe de Amnistía Internacional del año 2021[2], se describe la prisión de Black Beach (o Playa Negra) en Guinea Ecuatorial como un “escondite” o “un agujero” en el que la humedad causada por la proximidad del mar hace que los prisioneros vivan en condiciones infrahumanas. Además, el hacinamiento y las torturas frecuentes la convierten en un auténtico infierno. El centro penitenciario Oveng Azem es el más reciente de los tres. Fue inaugurado con bombos y platillos en 2018[3], como si de una catedral o biblioteca nacional se tratara, para reforzar la imagen de un régimen inquebrantable. El jefe de Estado, Obiang Nguema, acudió a la ceremonia junto a su esposa y, en aquel entonces, la prisión construida por la empresa Blue Skies Word fue descrita como el centro penitenciario más moderno del mundo. A fecha de hoy, la modernidad de las instalaciones no se cuestiona, pero sí los tratos a los recluidos. Una de las más recientes denuncias de torturas y excesos que involucra a la cárcel de Oveng Azem se produjo en enero del 2023 con la muerte del opositor Julio Obama Mefuman[4], de 61 años, quien había sido secuestrado en 2019 junto a otros tres opositores en Sudán del Sur y llevado a la fuerza hasta Guinea Ecuatorial donde se denunciaron reiteradas torturas antes de su condena a prisión de por vida bajo la acusación de intento de golpe de estado y terrorismo. Se llegó a confirmar que un hijo del jefe de Estado estaba involucrado en la tortura[5].

Las circunstancias de este rapto siguen investigándose. Familiares de los otros secuestrados que acompañaban a Julio Obama y que siguen en vida, permanecen a la espera de noticias. De hecho, el periódico El País publicó un documental[6] en diciembre del 2024 que revela los métodos y engaños empleados por el régimen ecuatoguineano para acabar con los opositores. Los periodistas no dudaron en tildar esta persecución de “cacería criminal” orquestada por el dictador de Guinea Ecuatorial.

La situación carcelaria en Guinea Ecuatorial es explosiva y preocupante. En realidad, Guinea se ha convertido en una gran cárcel a cielo abierto. A modo de ilustración, la jurista y activista guineana Luzmila Ondo Bise explicó en una entrevista reciente que el uso desmedido de la represión afectaba particularmente a los hombres y era una clara forma de silenciar a familias y poblados enteros. Llegó incluso a expresar que: “Casi la mitad de la población masculina de Guinea Ecuatorial está encarcelada o ha tenido que huir del país”[7], como resultado de una política sistemática de silenciamiento.   

En este contexto, y dado el tiempo transcurrido, sólo podemos desear que el silencio se rompa y que el poeta Ballovera, al igual que los demás arrestados, puedan expresarse, contactar a sus seres queridos y defenderse. A Francisco Ballovera no le han dicho por qué permanece encerrado, aunque él intuye que fue por llevar comida y agua a sus paisanos presos. Pero entonces, ¿quién llevará comida y agua al propio Paco? ¿Quién se atreverá, en ese régimen del miedo, a preguntar por los motivos de su arresto?

Y también: ¿Cómo aportarle humanidad a este eterno “Proceso” que vive Guinea Ecuatorial?

 

Johari Gautier Carmona  

@JohariGautier

 

Nota del autor: En 2021, el escritor ecuatoguineano Francisco Ballovera publicó los cuentos “La rana camuflaje y la abuela Mémvè De Ôkêtê” y “La niña que soñaba con los ángeles” en PanoramaCultural.com.co. Tres años más tarde, en agosto y octubre 2024, el colectivo Biafra se puso en contacto con la redacción del periódico en busca de apoyo solidario. El correo recibido transmitía el desespero del autor encarcelado. A raíz de estos estos contactos, y viendo que la situación no parecía resolverse, realicé algunas entrevistas y una investigación que concluyeron con este reportaje.

 

Referencias: 


[1] Amnistía Internacional. “Guinea ecuatorial: Ramón Esono, excarcelado”. 8 de marzo del 2018. https://www.es.amnesty.org/en-que-estamos/noticias/noticia/articulo/guinea-ecuatorial-ramon-esono-excarcelado/

[2] Aministía Internacional. “El infierno viviente de los prisioneros desaparecidos de Guinea Ecuatorial y sus familias”. 23 de junio del 2021. Ver: https://www.amnesty.org/en/latest/campaigns/2021/06/the-living-hell-of-equatorial-guinea-missing-prisoners/ 

[3] PDGE. “El presidente inaugura el centro penitenciario de Oveng Ansem”. Guinea Ecuatorial. Julio 2018. Ver: https://www.pdge-guineaecuatorial.com/carcel-inauguracion-obiang-nguema-mbasogo/

[4] Euronews.com. “Guinea Ecuatorial | Muere en prisión un opositor español a la dictadura de Obiang” . Enero del 2023. Enlace directo: https://es.euronews.com/2023/01/16/guinea-ecuatorial-muere-en-prision-un-opositor-espanol-a-la-dictadura-de-obiang

[5] El País. “Muere uno de los opositores españoles a Obiang preso en una cárcel de Guinea Ecuatorial “. Madrid, España. Enero del 2023. Enlace directo: https://elpais.com/espana/2023-01-15/muere-uno-de-los-opositores-espanoles-a-obiang-preso-en-una-carcel-de-guinea-ecuatorial.html  

[6] El País. “OBIANG: La cacería criminal del dictador de Guinea Ecuatorial | Documental EL PAÍS”. Madrid, España. Diciembre del 2024. Enlace directo: https://www.youtube.com/watch?v=fJcL-7snWgA  

[7] Real Politik. “Luzmila Ondo Bise: "La mitad de la población masculina de Guinea Ecuatorial está encarcelada"”. Argentina. Diciembre del 2024. Enlace directo: https://realpolitik.com.ar/nota/62354/luzmila-ondo-bise-la-mitad-de-la-poblacion-masculina-de-guinea-ecuatorial-esta-encarcelada/

lunes, 3 de julio de 2023

El sufragio femenino

Seguimos a vueltas con el periodo electoral...

Recientemente recogía Jordi Pascual Mollá las declaraciones de Trifonia Melibea Obono sobre que “Las mujeres podemos votar en Guinea Ecuatorial porque Clara Campoamor lo luchó en España” (Catalunya Plural):

La escritora, politóloga, investigadora y docente especializada en género y mujeres en África quiere dar a conocer su lucha: “En Guinea Ecuatorial tenemos una ley de orden público que penaliza la homosexualidad. Buscan sanciones, sobornos… Si no pagas, te llevan a una cárcel mayor. También mantenemos la ley de vagos y maleantes de 1954, que castiga a entre 12 y 24 meses de prisión a las personas homosexuales”.




(...) La igualdad entre hombres y mujeres a nivel político a priori está recogida legalmente en Guinea Ecuatorial, pero en la práctica es inexistente. ¿Cuáles son los pasos a seguir para hacerla efectiva?

Hay que reconocer a las mujeres como personas con derechos humanos. En la época de Franco, las mujeres no podían tener cargos. En Guinea Ecuatorial, como debía dar una apariencia de democracia y de derechos, se creó un mecanismo por el cual las mujeres ocupan escaños, pero no tienen poder… Cuando intentan incidir, se las cambia. Pero esto no debe ser sólo un compromiso sobre el papel, porque en estos momentos no hay ningún tratado sobre los derechos de las mujeres que Guinea Ecuatorial no haya ratificado. Son tratados que se quedan en Ginebra, sin cumplir requisitos y avances en Guinea.

Aunque Guinea Ecuatorial fue una colonia española, reconocida como provincia, en España se conoce poco su realidad. ¿Qué te encuentras cuando la explicas aquí?

Gente que me dice: “Ay, qué pena lo que ocurre en tu país. ¿En qué parte de África está?” [Ríe] Bien, también me encuentro la solidaridad de muchas mujeres feministas que saben qué pasa en Guinea. Cuando voy a las aulas me gusta preguntar si conocen el nombre de alguna feminista española, y generalmente no saben decirme ninguna. Creen que, dado que otras mujeres ya lucharon, ahora ya lo tenemos asegurado. Si preguntas qué españolas lucharon por el derecho a voto de las mujeres, terminan diciéndote que fueron las sufragistas inglesas. ¡Si no lo saben de España, ¿cómo lo van a saber de Guinea?! 

Esto responde también a la mirada paternalista de las antiguas fuerzas imperiales sobre sus ex colonias.

Sí, pero es una mirada que también se vive en Guinea Ecuatorial a la inversa, en contra de los blancos. Por ejemplo, la primera constitución guineana se aprobó en Madrid, porque al franquismo ya no le convenía la imagen de país con colonias y por eso quería deshacerse de Guinea. Era una condición de la Comunidad Económica Europea para la paulatina incorporación de España. España no quería dejar una herencia desastrosa en Guinea Ecuatorial por eso mismo. Las conquistas de las feministas de la Segunda República se reprodujeron en esa primera constitución guineana hecha por el franquismo: el derecho a la educación, al voto… Son los únicos derechos que hemos tenido las mujeres. Las conquistas de las feministas españolas llegan de rebote a Guinea. Si las mujeres podemos votar en Guinea Ecuatorial es porque Clara Campoamor lo luchó en España.

¡Lo más curioso es que os lo dio Franco!

¡Claro! [Ríe] ¡De hecho, el régimen autonómico empezó en Guinea Ecuatorial y siguió en España porque éramos una provincia! Todo porque debían dejar una ex colonia en forma de país democrático con una constitución propia. Ahora bien, dile a una chica negra de Guinea, con racismo hacia los blancos, que ella tiene derecho a voto gracias a que una blanca luchó por conseguirlo. (...)

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